En este parque, puedes ver como los volcanes están activos por las columnas de humo que salen de cráteres y grietas subterráneas. Es una zona peligrosa pero bajo control. Los humos son un poco tóxicos, y cuando terminas la visita a la zona del cráter más grande sientes una serie de náuseas algo desagradable. Pero la visita siempre merece la pena. El parque es inmenso y puedes conducir horas y horas entre la selva o en grandes superficies negras de lava donde ves las ondas que dejó sobre la tierra la última actividad del volcán.
Para mí, lo más bonito del parque se encuentra en la costa, donde los acantilados tienen capas muy visibles de lava y donde abajo rompen las olas con violencia. Es muy raro, pero mirando al Pacífico desde allí, desde las antípodas de las Baleares y con un paisaje que nada tiene que ver con el que conozco, me sentí en casa. Me senté en una roca a mirar el océano, a respirar la brisa marina y a sentir como las olas entraban bajo las piedras sobre las que estaba y me sentí feliz y en mi casa.
Sin duda, en algunas zonas de este parque sientes el peso de la historia natural. Ves como se van creando islas porque, el archipiélago de Hawaii está en constante crecimiento y dentro de unos miles de años serán visibles islas que ahora todavía se están formando bajo el agua. Además, estos paisajes son muy interesantes para los expertos porque ven qué especies son capaces de nacer de entre la destrucción y, por tanto, podría considerarse la flora más fuerte y que podría llevarse a otros planetas para crear vida allí.
1 comentario:
Això ja no és magaluf :)
m'encantes ses fotos, vaja paissatge més precios!
I a tu, te veig ben guapa i contenta així que ja va bé!
Un beso moooolt fort!
Margalida.
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